Capitulo 04

Perdon la demora¡¡ Tengo ciertos problemas con mi computadora :S

Pero aqui esta el capitulo¡

Le doy la bienvenida a la nueva seguidora del blog y le doy las gracias por ser parte de este blog y esta historia

Espero disfruten el cap y comenten mucho¡¡

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-"La noche que me quieras..."- Sonaba por toda la casa- " el cielo azul, bordado de estrellas, sera para ti..."

Alicia cantaba mientras cocinaba, parecía que nada hubiera pasado hace ya una semana, todo estaba en calma total.

Anastasia y yo habíamos vuelto de cazar y nos habíamos duchado para eliminar cualquier rastro de sangre, tierra u olor de animal que pudiera haber en nuestra ropa. El rico olor de la paella que Alicia estaba haciendo inundaba toda la casa haciendo que mi parte humana me hiciera ir corriendo al comedor en el momento en que Alicia servia.

- Valla, parece que alguien tiene hambre- dijo Alicia sonriendo de oreja a oreja

- sera, "Algunos"- dijo Annie sentándose en frente a mi. Alicia rió libremente y siguió sirviendo la comida

Anastasia miraba extrañada a Alicia, pero era de esperarse: La muchacha era toda sonrisas cuando tendria que estar hecha un mar de lagrimas encerrada en su cuarto.

- ¿Estas bien?- solte de la nada. Tanto Alicia como Anastasia se callaron y dejaron caer los cubiertos sobre la mesa y me miraron. Alicia con algo de dolor y Annie con nerviosismo

- ¿porque tendría que estar mal?- respondio removiendo incomoda la comida de su plato

- Alguien normal tendria que estar llorando a mares

- Bueno- dijo sonriendo- entonces yo no soy normal

le devolvi la sonrisa y volvi a comer ante la mirada atonita de mi hermana, la cual bufo y siguio comiendo

- "Vengo a ver, si en tu palida frente..."- sonaba por toda la casa- "Al fijar tus pupilas en mi mirar..."

Alicia estaba tarareando un corto bolero cubano mientras limpiaba parsimoniosamente su violín. Pasaba suavemente un trapo sobre la madera, luego coloco la hombrera en su lugar, puso el violin en su hombro, levanto el arco ya preparado y comenzo a tocar. Estaba sentada en la sala, frente a un gran ventanal que dejaba pasar la luz amarilla del atardecer y creando una escena digna de recordar para siempre. Yo estaba sentado en el sofa, admirando secretamente los movimientos ligeros pero rapidos de su brazo, como sus dedos parecían tener vida propia

-¿Qué tanto me ves?- dijo ella dejando de tocar y fijando su vista en mi rostro.

-Quizá- respondí sonriendo- o quizá solo observaba el paisaje detrás de ti.

Camine lentamente hacia ella y tome mi viola que reposaba sobre el piano de cola, donde lo había dejado en la mañana luego de intentar catastróficamente hacer un arreglo de una canción con mi hermana.

-¿Qué tal si hacemos un dúo de Violín y Viola?- pregunte sentándome frente a ella.

-Perfecto.

Estuvimos tocando por buen rato, estábamos absortos en la melodía que surgía de entre las cuerdas de nuestros instrumentos que dimos un brinco cuando sonó el timbre. Me levante y apenas puse la mano en el pomo de la puerta, esta se abrió y dejo ver a un Erick Totalmente distinto al que recordaba.

Su rostro demostraba una dureza inimaginable, tenía los ojos rojos y el aliento le apestaba a Alcohol. Anastasia venia justo detrás de el, le tomo por el brazo y jalo de el. En ese instante Erick soltó un gruñido por lo bajo mientras miraba fijamente a mi hermana, luego me miro a mi y un brillo dorado apareció en sus ojos. Jale a mi hermana dentro del apartamento y luego cerré la puerta dejándola a ella y Alicia dentro.

Tome a Erick del cuello y lo aprisione contra la pared.

-¿Desde cuándo eres vampiro?- exigí

-Desde que llegue a España- dijo burlonamente

-¿Y quién diablos te convirtió?- pregunte apretando mas su cuello

-Una vieja amiga de tu madre- respondió sonriendo con sorna- Cuando vas a tu madre, dile que le manda saludos

En un movimiento rápido de dio un puño en el estomago mandándome hasta la otra pared. Me levante lo más rápido que pude pero ya Erick no estaba. Entre al apartamento limpiándome el polvo del pantalón encontrando a una Anastasia que caminaba de un lado a otro del apartamento, me pare frente a ella y tome su brazo.

-Ahora mismo me dices todo lo que sepas